En un tramo solitario de carretera, en medio de la larga noche lapona, hay una gasolinera que parece fuera del tiempo. Es la única señal de vida en kilómetros a la redonda. El olor a combustible impregna el aire que la rodea, y su luz tenue guía a los viajeros noctámbulos que necesitan hacer provisión en medio de la oscuridad. La carretera, normalmente transitada durante el día, de noche está desierta. A veces, algunos camioneros cansados se detienen para descansar unas horas, pero es raro que haya movimiento durante la noche. Las luces intermitentes de la instalación proyectan penumbras sobre la nieve, creando una atmósfera un punto inquietante. El único rumor que rompe la quietud es el suave susurro del viento, que provoca que las ramas de los árboles cercanos se balanceen y hagan tintinear los carámbanos helados. Más allá de esto, todo es silencio.
“ El sector alimentario es responsable del 30% de la demanda mundial de energía
— Organización de les Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura
La producción, procesamiento, transporte, distribución y preparación de alimentos son responsables del 30% del consumo mundial de energía. El 80% de la demanda energética global procede de fuentes no renovables como el gas o el petróleo, lo que en muchos países genera limitaciones relacionadas con la disponibilidad y la seguridad energética. La excesiva dependencia de combustibles fósiles hace a las naciones vulnerables a la volatilidad de los precios e, incluso, a los conflictos. Por otra parte, el consumo de energía basado en combustibles fósiles es una de las principales causas del cambio climático, ya que produce emisiones de gases de efecto invernadero como el dióxido de carbono, entre otros muchos contaminantes que inciden en la calidad del aire y que también perjudican a la salud humana.
Se espera que la dependencia del gas o del petróleo disminuya a medida que se incremente el uso de energías renovables, como la energía solar, eólica, hidráulica u otras fuentes verdes que reducen los impactos ambientales asociados al consumo de energía. Algunos países han alcanzado niveles muy altos de energía renovable en su mix energético, como Dinamarca, que obtiene aproximadamente el 50% de su energía a partir de fuentes eólicas. Sea como fuere, el consumo de alimentos de proximidad minimiza los impactos ambientales asociados al consumo de energía.
